Irse como mejor opción,
pues quedarse
es arañar el corazón.
Decirte hoy
que lo que nos faltará mañana
será declararnos fallida.
Y quizá el problema
fue no advertirnos,
ver la caída muy lejos
cuando estaba
a la vuelta de la esquina.
Mis manos van a añorar(te),
mis ojos
van a buscar otro mundo
en el que bañarse,
¡Mi vida!
Mi vida,
va a vaciarse,
para quién sabe cómo
rellenarse.
Querido enemigo,
caballero desarmado,
reina descoronada
¿Cuándo anocheció
en la mañana?
Recoge los sentimientos
en el baúl a mano izquierda
de tu pecho,
pues fuera quizá logran hacerte reír
y hoy les toca desistir.
¡Dulce muerte (des)encontrada!